En el corazón de la región gallega, encontramos un postre que es símbolo de tradición y sabor. Con ingredientes humildes y una historia rica, esta delicia es un reflejo de la identidad local.
La Tarta de Santiago de Compostela, donde la almendra se convierte en protagonista, es una manifestación de la pasión culinaria gallega y una celebración de la generosidad de la tierra. Cada porción es un tributo al encanto de Santiago de Compostela y su cocina tradicional, ofreciendo una experiencia culinaria que une el sabor de la almendra con la autenticidad de esta encantadora ciudad gallega.
Tarta de Santiago de Compostela:Ingredientes y modo de preparación
Para la base:
- 200 gramos de almendras molidas
- 200 gramos de azúcar
- 4 huevos
- Ralladura de limón
- Mantequilla y harina para el molde
Para la cobertura:
- Azúcar glas (para decorar)
- Una plantilla de la cruz de Santiago (opcional)
Modo de Preparación:
- Precalienta el horno a 180°C (350°F) y engrasa un molde redondo con mantequilla y espolvorea con harina.
- En un bol, mezcla las almendras molidas y el azúcar.
- En otro bol, bate los huevos y agrega la ralladura de limón.
- Combina la mezcla de huevo con la mezcla de almendras y azúcar hasta obtener una masa homogénea.
- Vierte la masa en el molde y alisa la superficie.
- Hornea durante aproximadamente 30-35 minutos o hasta que esté dorada en la parte superior y firme al tacto.
- Deja enfriar la tarta antes de desmoldar.
- Una vez fría, espolvorea azúcar glas por encima y, si lo deseas, coloca la plantilla de la cruz de Santiago en el centro de la tarta y espolvorea azúcar glas alrededor de ella.
- Disfruta de la Tarta de Santiago de Compostela, un postre emblemático que rinde homenaje a la rica tradición culinaria de la región.
Como mejorar esta receta de Tarta de Santiago
Para perfeccionar la Tarta de Santiago de Compostela, es crucial utilizar almendras de alta calidad, preferiblemente almendras españolas, ya que son el ingrediente principal y determinan en gran medida el sabor. Además, ajustar la cantidad de azúcar puede influir en la dulzura, permitiendo que el sabor característico de las almendras brille sin ser abrumado. La adición de una pizca de canela puede aportar una profundidad de sabor sutil y realzar la experiencia. En resumen, la elección de ingredientes y el equilibrio de sabores son esenciales para crear una Tarta de Santiago de Compostela auténtica y deliciosa que celebre la tradición y la identidad culinaria de la región.