En Combarro, un pequeño rincón costero de Galicia, la tradición culinaria se entrelaza con la abundancia de piñones locales. Los piñones, un tesoro gastronómico de la región, desempeñan un papel esencial en un postre icónico que celebra la riqueza de la zona.
La tarta de piñones es un homenaje a la herencia local y la simplicidad de los ingredientes de calidad. La combinación de piñones tostados, azúcar y huevos se convierte en una deliciosa y crujiente experiencia que rinde tributo a la belleza y el sabor auténtico de Combarro. Una vez que pruebas esta tarta, te sumerges en la tradición y el sabor de la región de una manera inolvidable.
Tarta de Piñones de Combarro: Ingredientes y modo de preparación
Para la masa:
- Harina de trigo (200 gramos)
- Azúcar (100 gramos)
- Mantequilla (100 gramos)
- Huevo (1 unidad)
Para el relleno:
- Piñones (200 gramos)
- Azúcar (200 gramos)
- Leche (200 ml)
- Harina de trigo (2 cucharadas)
Modo de Preparación:
Para la masa:
- En un bol, mezcla la harina de trigo y el azúcar.
- Agrega la mantequilla en trozos y trabaja la masa hasta que tenga una textura arenosa.
- Añade el huevo y mezcla hasta obtener una masa homogénea.
- Extiende la masa en un molde para tarta previamente engrasado y enharinado, cubriendo el fondo y los lados. Reserva.
Para el relleno:
- En una cacerola, calienta la leche y agrega los piñones.
- En otro recipiente, mezcla el azúcar y la harina de trigo.
- Añade esta mezcla a la leche con piñones y cocina a fuego lento hasta que espese.
- Vierte la mezcla de piñones sobre la base de masa en el molde.
- Hornea en un horno precalentado a 180°C durante aproximadamente 25-30 minutos, o hasta que la tarta esté dorada y cuajada.
- Deja enfriar antes de desmoldar y servir.
La Tarta de Piñones de Combarro es un manjar que combina la crujiente textura de los piñones con la dulzura de la masa, creando un postre que refleja la autenticidad de la cocina gallega. Perfecta para disfrutar en cualquier ocasión especial.
Como mejorar esta receta de Tarta de Piñones
Se sugiere incorporar una pizca de canela molida en el relleno. Esta especia añade una profundidad de sabor y un toque aromático que complementa a la perfección la riqueza de los piñones y el dulce de la tarta, elevando la experiencia gastronómica a otro nivel. Además, servir la tarta ligeramente caliente con una bola de helado de vainilla, puede crear una combinación de temperaturas y texturas irresistibles que deleitarán los paladares más exigentes.